ASIMA reconoce a Refineria sus 20 años de trayectoria

Dos décadas. Cuatro lustros. Veinte años.

Un camino —a veces en línea recta, otras serpenteante, pero siempre apasionante— en el que crear, mantener y elevar los cimientos de una empresa, Refineria, que nació de la cabeza, la intención, la osadía y las ganas de Xavier March y que ahora, además de ser el hogar de más de 80 personas, es una de las empresas digitales más reconocidas de Baleares. 

Dedicación, trabajo duro y perseverancia, pilares de la metamorfosis de una empresa que a lo largo de los años ha ido creciendo y transformándose, adaptándose a los tiempos y a las necesidades, pero siempre manteniendo su esencia: su pasión por lo digital.

El próximo martes 21 de marzo a las 20h, la Asamblea General de ASIMA ha decidido reconocer la historia, la evolución y la trayectoria de Refineria y nosotros no podemos más que agradecer este reconocimiento. Además, echar la vista atrás, ver todo el aprendizaje acumulado a nuestras espaldas y reconocer lo bonito que es formar parte de este viaje.  

Una historia escrita a lo largo de estos 20 años en la que cada capítulo ha sido una experiencia enriquecedora, una lección aprendida y una oportunidad de crecer y mejorar juntos. Cada cliente atendido, cada proyecto desarrollado, cada colaborador satisfecho es parte fundamental de nuestra historia y nuestra evolución. Cada cicatriz es una lección aprendida que nos marca el camino a seguir.

Y, aunque sean fechas de mirar —aunque sea un poquito— hacia atrás y ver todo lo conseguido en veinte años, nosotros somos más de mirar hacia adelante y admirar todo el camino que nos queda por recorrer.

Seguimos con ganas de crecer, de aprender, de fallar y de mejorar. Con ganas de nuevos retos y, por lo menos, de dos décadas más repletas de proyectos, clientes, refineros y amigos.

Además, queremos agradecer de nuevo a la Asamblea General de ASIMA este reconocimiento a Refineria, entre otras empresas con solera de las islas que están de aniversario. 

El reconocimiento al trabajo duro es siempre un motivo de celebración.